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La ferme basque


La ferme basque, est une construction rurale isolée, vieille d'à peu près 500 ans, a la particularité de réunir dans un seul habitat, l'écurie, le grenier et le pressoir. Ce fût tout un succès du point de vue logistique et efficacité, puisque les premières maisons basques étaient des simples cabanes en bois recouverte de toîtures végétales. 

Con una superficie de alrededor de 1000 metros cuadros distribuidos en dos o tres plantas que unía y protegía las diferentes generaciones familiares.

La vida trascurría en el cuidado de los animales, gallinas, ovejas, vacas y caballos, y del cultivo de su huerta.

Habitualmente, el establo ocupa la planta baja y la vivienda, la planta superior, la buhardilla es utilizada como granero.

El tipo de construcción es de tejado longitudinal y a dos aguas, techado con tejas. Los materiales usados para su construcción suelen ser la piedra y la madera del lugar.

Su exitoso resultado como unidad económica cuasi autosuficiente y de unión intergeneracional debía de ser preservado, y aquí surge la necesidad de proteger la permanencia en el tiempo del caserío, para lo que se instauran las rígidas leyes de mayorazgo que hacían que el caserío y todas sus tierras fueran heredados exclusivamente por un único individuo, habitualmente el primogénito de la familia. A pesar, que el derecho foral permitía la libre disposición de los bienes (no existía el derecho de "legítima"), por lo que la herencia podía transmitirse a algún otro vástago o familiar, incluyendo a las mujeres. Sin embargo, esto era algo excepcional, siendo habitualmente el primogénito varón el que heredaba la propiedad.

Esta circunstancia obligaba al resto de los varones de la familia, bien a emigrar, o pasar al clero, ejército o administración real. Si se quedaban en el caserío debían trabajar para el hermano mayor y en este caso no solían contraer matrimonio. Esto explica la cantidad de emigración que se produjo en estas tierras.

La propiedad recaía sobre el varón pero la administración del caserío solía estar a cargo de las mujeres de la familia, en un régimen cercano al matriarcado. Las mujeres llevaban a cabo el planeamiento de las cosechas, el ganado, etc. y en general administraban la propiedad. La importancia de la mujer dentro del núcleo familiar era y es muy importante. Ello ha dado pie a la teoría de la sociedad vasca como matriarcalista pese a tender hacia el patriarcado en sus estructuras sociales reales.

Se dice que el estatus de la mujer en la cultura vasca, por estas circunstancias históricas, es quizá el más alto de Europa.

 

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